El día 4 de junio de 2025 en nuestro instituto de Enseñanza Media San Isidro de Madrid hicimos la presentación del documental de la Unión Democrática de Estudiantes de Enseñanza Media UDEEM Los chicos del San Isidro. Colectivo de Memoria Histórica de UDEEM
En mi nombre, y creo que en el de todas las personas que hemos participado en este proyecto, agradecemos a la dirección del Instituto, a sus estudiantes y su personal (profesorado y personal de administración y servicios) la buena acogida que tuvo la presentación de nuestro trabajo de recuperación de la historia del Instituto.
El proyecto pretende destacar un hecho histórico concreto la represión ejercida por la dictadura en el curso 68-69 contra jóvenes menores de 18 años por promover una organización que reclamaba los siguientes derechos:
- Una enseñanza popular, no clasista, obligatoria y gratuita hasta los 18 años.
- Una enseñanza mixta, donde chicas y chicos compartiesemos la misma educación, que acabase con la discriminación de la mujer.
- Una enseñanza en lengua propia.
- Una enseñanza laica que suprimiese la Religión como asignatura.
- Una enseñanza humanística crítica y objetiva que promoviese el conocimiento.
- Una enseñanza que formase ciudadanos sin adoctrinamiento político, suprimiendo la asignatura de Formación del Espíritu Nacional y de Hogar.
- Una enseñanza impartida por profesorado con formación pedagógica.
En 1968-69 el número de personas que accedían a los estudios de bachiller en la provincia de Madrid de Castilla la Nueva era menos de la mitad de los que deberían acceder.
En 1968-69 solamente entre las matriculaciones de bachiller había cuatro mujeres por cada seis hombres.
En 1968-69 en la provincia de Madrid ocho de cada díez estudiantes de bachiller no tenían plaza en los institutos.
En 1968-69 la selectividad y el numerus clausus impuesto para el acceso a la universidad incrementaba el clasismo del sistema educativo.
Estas fueron las demandas que fueron tomando cuerpo en la incipiente organización de estudiantes de enseñanza media. Las elecciones de delegados, la participación activa de muchos estudiantes en la organización de UDEEM fue el planteamiento recogido en la U de unión. Dotaba de fortaleza el objetivo común colectivo sobre cualquier otra diferencia.
Además la exigencia de estos derechos vinieron impulsados por los comprtamientos de aquellos ordenanzas, conserjes o bedeles procedentes de las jubilaciones de los cuerpos de la policía armada y de la guardia civil, que actuaban con una mentalidad autoritaria y cuartelera como si fuesemos a forma parte de las fuerzas del «orden». Aún peor fue la promoción y el respaldo que ese autoritarismo tuvo entre parte del profesorado y de la dirección de los centros.
En aquellos años se nos detuvo, torturó, encarceló, procesó judicialmente, juzgó … por demandar estos derechos, poder expresarnos, poder reunirnos … Estábamos haciendo política y no teníamos derecho a hacer política. Eso que a día de hoy han pervertido y considera que la política es una profesión de los políticos y que para nosotros entonces y ahora ser ciudadano es luchar y pedir una vida digna, una educación sin segregación económica o de género cubierta con nuestros impuestos y destinada a una oferta general en centros públicos.
La libertad de la dictadura era tomar cerveza. Pero impedía reuniones, concentraciones, publicaciones … eso era comunismo.
