Represión 1969

Estaba vigente el Estado de Excepción en todo el territorio nacional instaurado por la Dictadura por Decreto Ley de 1/1969, de 24 de enero, BOE del día 25. Estuvo vigente este Estado de Excepción hasta el día 22 de marzo de 1969 por Decreto Ley 8/1969, de 22 de marzo, BOE  del día 24.

A partir del 10 de marzo de 1969 se inician las primeras detenciones de jóvenes estudiantes de bachiller del Instituto San Isidro de Enseñanza Media de Madrid por miembros de la policía política de la dictadura (Brigada Político Social) y trasladados a la Dirección General de Seguridad (DGS) en la Puerta del Sol de Madrid.

Unos fueron detenidos en su domicilio familiar y otros fuimos detenidos en las aulas del instituto ante la sorpresa de profesores y estudiantes.

Los detenidos teníamos en aquel momento 17 años, 16 años y 14 años. Permanecimos en la DGS hasta el día 23 de marzo sometidos a torturas e interrogatorios, aislados en celdas individuales los que teníamos 16 y 17 años, los menores de 16 fueron interrogados y amenazados delante de sus padres. La tarde noche del día 22 de marzo pasamos a celdas colectivas.

Nuestras edades son un indicativo del papel que habíamos desempeñado en la lucha contra el golpe militar y la guerra desencadenada en 1936. Nuestros orígenes familiares eran diferentes hijos de militar en activo, de guardia civil en activo, de funcionario, de sindicalista preso, de antiguos presos políticos, es representativo de la diversidad de nuestros orígenes familiares.

El día 23 de marzo se nos traslada a la cárcel de Carabanchel y permanecemos en celdas aislados, en período que se decía, hasta que el día 28 se nos lleva ante el juez militar que nos comunica el procesamiento según el Código Militar de 1945 y se nos aplica la prisión preventiva sin fianza. El Decreto 1794/1960 habilita al gobierno para llevar ante la jurisdicción militar, legislación de posguerra, se nos aplica el artículo 2º Serán considerado reos de delito de rebelión militar … y por el artículo 922 que contempla que los juicios sumarísimos el procesado permanecerá siempre preso.

Visto en perspectiva resulta sorprendente, increible. Pero la dictadura actuaba de esa manera vulnerando sus propias normas. Se aplica una legislación de rebelión militar, no valoro que todos sabemos que ellos eran los rebeldes. Se lleva ante la jurisdicción militar a personas cuando ha finalizado el estado de excepción, que era la norma habilitante y que permitía con ello mantenernos presos por el consejo de guerra sumarísimo.

A día de hoy 10 de julio de 2019 y transcurrido medio siglo de nuestra detención no existe mención de reconocimiento de ningún tipo para aquellos estudiantes de instituto que emprendimos un camino de lucha contra la dictadura. Ni el Ministerio de Educación, ni la Consejería de Educación de la Comunidad de Madrid, ni el Ayuntamiento, ni el Instituto. No hablo de reconocimiento económico, a pesar de haber estado secuestrada mi libertad.

Un minuto de nuestra detención representa una mayor dignidad que todas aquellas personas que niegan las torturas sistemáticas en la Dirección General de Seguridad en la dictadura del golpista Franco y su banda. Es un edificio que no hace mención a la sede madrileña de la represión de la dictadura.

De igual modo se ha dinamitado la cárcel de Carabanchel que recibía un elevado número de presos de la Dictadura.

Aunque pretendan hacer desaparecer y dulcificar la represión de la Dictadura, diciendo que fue un régimen autoritario que se suavizo con el paso de los años. Nadie puede negar que quienes tenían la obligación de garantizar la legalidad democrática cargaron sus armas y desencadenaron una guerra y una represión que duró 39 años y cuatro meses. Se empaparon en sangre hasta el último minuto.

La historia reconocerá el papel de las personas que lucharon por la libertad (víctimas) y sancionará a los represores con crucifijos y pistolas al cinto (verdugos).